martes, 23 de marzo de 2010

Con qué facilidad se pierde la vida

― Lo sé, deja de insistir.

― Es sumamente fácil...

― ¡Qué tentaciones tengo! Y es que me he acostumbrado, como el que se toma un par de cafés al día, a tomarme las pastillas a pares. No importa que sean aspirinas o «paracetamoles», no importa...

― Lo que debe preocuparte es la dosis.

― Debe ser letal, sino no quiero siquiera intentarlo.